Por: Beatriz Montero Cuevas
Acapulco, Gro., 25 de octubre del 2024.- Hoy, a pocos minutos de
comenzar este día, se cumple un año del paso devastador del
Huracán Otis, que con toda su furia arremetió contra los habitantes de Acapulco, causando daños económicos incalculables y numerosas pérdidas humanas.
En ese momento, Acapulco
parecía un campo de guerra, todo destruido, sin árboles, sin luz, sin agua
potable, sin señal de internet, todo era desolación, por el gigantesco tamano de "Otis" y su fuerza descomunal, un huracán así nunca antes visto. Sin embargo, aún con una
lluvia ligera, comenzó la rapiña a pequeños negocios, tiendas de conveniencia,
supermercados y centros comerciales.
A un año, Acapulco volvía
a brillar, se restauraron en su totalidad los servicios públicos, la vegetación
volvió a crecer y los negocios saqueados reabrieron sus puertas.
Pero, llegó el
Huracán John en septiembre. El puerto fue afectado de nuevo tras cuatro días de intensas e
imparables lluvias que ocasionaron graves inundaciones en los asentamientos
humanos de la Zona Diamante.
Afortunadamente no hubo rapiña a supermercados, solo a algunas tiendas de conveniencia. El Gobierno Federal volvió a brindar su ayuda a los afectados, muchísimos menos que en "Otis", llegaron de nueva cuenta las despensas de particulares y varios comedores.
A pesar de enfrentar dos huracanes en menos de un año, Acapulco y sus habitantes se volvieron a poner de pie, no en su totalidad, pero con un gran avance en su infraestructura turística, en sus viviendas, en el comercio local, en todos los aspectos.
Por algo somos Guerreros, porque nacimos en Guerrero, a pesar de que en los acapulqueños, principalmente, quedaran permanentemente en sus memorias, esas horas de miedo y terror que les produjo el descomunal "Otis".
